Recortes presupuestarios recientes parecen haber surtido su efecto en Univision. Como resultado, el semanario político Al Punto se ha visto obligado a reciclar una entrevista de hace siete semanas con el actor Benicio Del Toro, con el fin de propagar una narrativa antitrumpista.
La entrevista con Del Toro, grabada durante su gira promocional de su más reciente película en la serie Sicario, se transmitió por primera vez el 24 de junio. Ramos transmitió la entrevista inédita en su podcast Contrapoder el 3 de julio. Pasadas siete semanas, Ramos sacó “la segunda parte” de la entrevista con Del Toro, mostrando la perspectiva del actor con respecto a los temas de Puerto Rico y de la crisis de separación de familias en la frontera.
Aquí va el segmento recalentado sobre Puerto Rico, lo cual trae sus propios problemas.
JORGE RAMOS: El presidente Trump se reunió con el gobernador y le dijo: "Te hemos ayudado demasiado". ¿Tú qué crees? ¿Ayudaron--ayudó demasiado Trump?
BENICIO DEL TORO: No, no, demasiado, no.
RAMOS: ¿Hizo lo suficiente?
DEL TORO: No, ayudaron, ayudaron y hubo ayuda, pero--
RAMOS: Cuando env--cuando tiró esos rollos de papel toalla, ¿cómo te sentiste como puertorriqueño?
DEL TORO: Humillado. Humillado, humillado, eh...
RAMOS: Eso no lo hizo con las víctimas en la Florida--
DEL TORO: En la Florida o en tejas, no, porque ellos, los que... Los que estaban recibiendo esos papeles de toalla no pueden votar por el presidente. Trump es un negociante. Estos no tienen plata de verdad, tienen dinero de Monopolio--los que estaba cogiendo esos... No tienen dinero de verdad. Los que están en Tejas, los que están en la Florida sí tienen dinero de verdad. Para eso es que votan por él. Él--él--él los ve como--entonces, él no hace eso en--en la Florida, él no hace eso en--en--
RAMOS: Pero lo hizo con Puerto Rico.
DEL TORO: Lo hizo con Puerto Rico, sí--
RAMOS: Hablando de--
DEL TORO: Y da pena, da pena, ¿ah? Que--que tengamos un presidente que ve las cosas así.
Este intercambio particular estaba fundamentado sobre una falsedad propagada por Ramos- específicamente, la cita que se inventó de Trump en la cual supuestamente dijo “les ayudamos demasiado” al gobernador de Puerto Rico. Pero Trump jamás dijo tal cosa. Según The Hill:
El presidente Trump le dijo el jueves al gobernador de Puerto Rico que su gobierno había “hecho mucho” para ayudar al territorio a recuperarse tras el impacto de dos huracanes devastadores el año pasado.
Trump dirigió los comentarios al gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, durante un almuerzo de trabajo con gobernadores estadounidenses, según reporteros allí presentes.
Uno asume que Ramos sabe la diferencia entre “mucho” y “demasiado”. La sonrisa de Ramos mientras le planteaba la pregunta a Del Toro sugiere que creyó que se salió con una. Del Toro no tomó la carnada, lo cual llevó a Ramos a preguntar por el papel toalla. Este afán de promulgar el agravio racial, con “Remember The Bounty” como estrategia principal, queda desmentido por los hechos. Recuerden este testimonio de alguien allí presente, publicado aquí en MRC Latino:
La realidad es que el presidente arrojó rollos de toallas de papel porque vio que había un montón de gente detrás de las primeras filas que no podían llegar hasta él para recibir nada. El presidente quería incluirlos, puesto que el acto era para distribuir provisiones. El público de atrás inclusive se lo pidió, pues no podían llegar hasta el presidente. Él no iba a arrojarles botellas de agua o comida enlatada, que podían lastimar a alguien, sino que lo hizo con rollos de toallas de papel, que no iban herir a nadie.
Aunque esto fue presentado por los medios como una muestra de desprecio hacia los puertorriqueños que estaban allí, en realidad fue un acto de frustración, debido a la desorganización del evento. Él quería llegar a tanta gente como fuera posible con las provisiones, pero no estaba en el lugar adecuado para hacerlo. Desde donde yo me encontraba, tomé fotos de él en las cuales se le ve claramente frustrado por la forma desorganizada en que se llevó a cabo el evento.
Una vez más, el propósito de la entrevista tenía la intención clara de llevar a Del Toro a atacar a Trump- aún a costo de cosas tan inconvenientes como los hechos. En retrospecto, el recalentado de una entrevista de siete semanas hace sentido perfecto. ¿Por qué pasar el trabajo y costo de pautar una entrevista fresca, cuando un recalentado hace el trabajo?
En cuanto a Ramos, le conviene recordar esta desgracia de entrevista la próxima vez que quiera chillar sobre la corrida que le dieron de la conferencia de prensa de Trump o sobre el hecho de que gran parte de los hispanos en los Estados Unidos lo ignoran. Ramos ciertamente no es un “enemigo del pueblo”, pero ha mostrado ser un enemigo de la verdad.