Una vez más, nuestro país se estremece ante la noticia de crímenes horrendos cometidos contra los más vulnerables entre nosotros- de mano de individuos que se encuentran en el país de manera ilegal. Lamentablemente, nuestras telecadenas domésticas de habla hispana claudicaron ante su deber colectivo de mantener informada a la comunidad; ya sea por ocultar el status migratorio de los sospechosos o de ni siquiera reportar la noticia.
Dos hondureños, quienes estaban en el país ilegalmente, fueron detenidos y acusados por el secuestro y violación brutal de una niña de 12 años de edad. Aunque los cargos iniciales fueron radicados en el condado Montgomery del estado de Maryland, se sospecha que partes de este delito fueron cometidas en el condado Arlington en Virginia, lo cual activaría la radicación de cargos federales.
El canal 5 (Fox) de Washington, D.C. no tuvo pelos en la lengua al reportar que los acusados de estos delitos gravísimos estaban aquí "ilegalmente desde Honduras", y que el Servicio de Aduanas e Inmigración (ICE, por sus siglas en inglés) confirmó su estatus de indocumentados al emitir la orden de detención.
Sin embargo, la edición del lunes del Noticiero Univisión fue un poco más...sutil, tanto en cuanto al estatus migratorio de los acusados como la orden de detención de ICE.
Gran diferencia entre "hondureños" e "individuos que inmigraron ilegalmente desde Honduras", o no? Los televidentes del Noticiero Univisión no tienen idea alguna del estatus migratorio de los acusados, y el calificativo de "deportables" no es sino una manipulación de los hechos con ambiguedad intencional. Cualquiera que esté aquí sin ser ciudadano estadounidense está bajo la jurisdicción de ICE, y por tanto, es "deportable"- desde el indocumentado que llegó ayer hasta un residente permanente que lleve décadas en el país- y la orden de detención de ICE es algo de rigor que se le aplica aún a los acudasos de delitos menos graves. Y contrario a Fox 5, el reporte de Univisión no presentó perspectiva alguna de quienes se oponen a las políticas liberales de ciudades santuario.
Pero al menos Univisión cubrió la noticia. Telemundo hasta ahora, al menos a nivel nacional, no ha dicho ni pío. Quizás esta noticia del vil secuestro y violación de una niña en las afueras de la capital del país sea algo que no cuadre con la campaña de la telecadena en anticipación de la audiencia del caso DACA/DAPA ante el Tribunal Supremo. No obstante, la decisión de no reportar una noticia como ésta traiciona el compromiso de la cadena de presentar noticias duras de manera justa e imparcial. También hay que presentar las noticias convenientes.
Los lectores regulares de esta columna conocen muy bien las aseveraciones del presentador Jorge Ramos hechas en la Universidad de Harvard de que los medios nacionales de habla hispana dependen de un influjo de cierta cantidad de inmigrantes de habla hispana (con o sin documentos) para poder sobrevivir. La política de esta decisión empresarial es evidente al ver la manera en la que las telecadenas domésticas de habla hispana cubren asuntos relacionados a la política migratoria, las ciudades santuarios, y por ende, la seguridad nacional. Sin embargo, decisiones comerciales tales como ésta, hechas en las suites ejecutivas y los salones de juntas, tienen consecuencias en el mundo real.
Y ahora, en algún lugar cerca de la capital, hay una niña destrozada de 12 años que tiene que enfrentarlas.
Nota al calce: No se crean que este fenómeno es exclusivo a la prensa hispana. A nada menos que el Washington Post también le tembló el pulso, con ese titular de "Dos hombres de Maryland acusados en violación de niña de 12 años". No conformes con ocultar el estatus migratorio de los acusados, prefirieron entrar en los detalles del morbo del crimen. Tanto Univisión como su reportera capitalina Lourdes Meluzá merecen crédito por tener la decencia de no hacer lo mismo.