Univision ha sido consistente en la cobertura favorable que le ha brindado al convicto terrorista de la FALN Oscar López Rivera. Ahora que López Rivera ha salido en libertad conforme a los términos de la conmutación de su sentencia otorgada por el expresidente Barack Obama, la cadena se apresta a transmitir una entrevista exclusiva en la edición dominical de Al Punto, que podría describirse -en el término más generoso- como apología terrorista.
En el segmento, el presentador Jorge Ramos evita el tener que incomodar al terrorista convicto con preguntas difíciles, dejando a López Rivera y el congresista Luis Gutiérrez servirse con la cuchara grande. López Rivera permaneció desafiante durante el transcurso de la entrevista, y Gutiérrez estaba efusivo en su adoración sicofántica al bombardero de la FALN, llegando a compararlo incluso con George Washington. Aquí hay par de los intercambios más sorprendentes. Primero, López Rivera deja las quijadas en el suelo al decir lo siguiente sin ironía alguna:
OSCAR LÓPEZ RIVERA: Yo no...yo no apoyo...yo no apoyo actividades donde la vida del ser humano esté puesta en peligro. Y para mí, es bien importante que se sepa.
Esto empieza a sonar noble y desprendido excepto que el uso de explosivos, por definición, pone a los seres humanos en peligro- y que al momento de su arresto el FBI le incautó a López Rivera seis libras de dinamita y cuatro detonadores en su apartamento de Chicago. Así que el decir lo contrario es una mentira descabellada que Ramos dejó pasar sin cuestionar, mientras Gutiérrez pelaba los dientes.
Hablando de Gutiérrez, el congresista de Illinios desempeñó un papel distinto al que se le ve normalmente en Al Punto. Gutiérrez fue partes iguales defensor, portavoz, y fanboy de López Rivera, en lugar de sus defensas acostumbradas de la amnistía migratoria.
Aunque vimos algo de su agresividad de siempre, cuando Ramos le planteó lo que podría haber sido la única pregunta incómoda a López Rivera- si tenía algo que decirle al hijo de uno de los fallecidos en el bombardeo del Fraunces Tavern en el 1975- a Joseph Connor. Así fue como Gutiérrez irrumpió en el monólogo impenitente de López Rivera, en lo que es sin duda alguna una de las exhibiciones más asquerosas hechas por un congresista en funciones de los Estados Unidos:
CONGRESISTA GUTIÉRREZ: Mira, Jorge, you creo que es bien importante indicar lo siguiente: y es que nuestro compañero Oscar López Rivera nunca fue acusado de lo que usted nos está hablando en este momento. Vamos a ser claros. El FBI, el Departamento de Justicia pudo haber acusado a mi compañero y hermano de eso y de cualquier otra cosa, porque él nunca reconoció la jurisdicción del sistema judicial colonial. Pero no lo acusaron. Ahora viene a hablar de cosas 30 años después. Yo siento gran dolor también cuando veo un hijo que pierde a su padre, y yo creo que todos vemos eso. La violencia en Puerto Rico ha existido en contra del movimiento independentista desde el momento que entraron las Fuerzas Armadas del Ejército de los Estados Unidos y ocupó a Puerto Rico. Así que no vamos a hablar esto por aquello. No. Nosotros vamos a echar adelante. Yo estoy muy feliz que Oscar esté aquí. Que él nos pueda dar su visión, que él nos pueda traer su tenacidad, su verticalidad, y su visión de un Puerto Rico donde todos nos paramos como mujeres y hombres dignos de pisar esta tierra con orgullo y con confianza en nosotros mismos. Yo siento gran confianza que mi hermano Oscar nos va a llevar a otro nivel, político, social, aquí en esta isla de Puerto Rico, donde nosotros somos los que vamos a dirigir nuestro futuro.
No suele ocurrir que un congresista de los Estados Unidos tome el lado de un terrorista convicto contra los seres queridos de las víctimas de un ataque terrorista, pero a eso hemos llegado.
Gutiérrez y López Rivera pudieron haber tenido la elegancia de dirigirse a Connor directamente tal como Ramos lo sugirió, y expresar algún sentir por lo que ocurrió en el Fraunces Tavern. Pero en su lugar, ambos decidieron parecerse al personaje de Hyman Roth en El Padrino II, llorando la muerte de Moe Greene y diciendo que "éste fue el negocio que escogimos". Excepto que ni Frank Connor ni las otras víctimas de los otros atentados escogieron ser parte del negocio de la FALN. "¿Y qué de nuestros caídos?" era la respuesta más carente de clase y dignidad que se le podía dar a esa pregunta.
Y aquí, otra vez, Ramos simplemente los torea. En su afán de preguntar si López Rivera era el Mandela boricua (no lo es), se le queda indicar que nadie fue acusado del bombardeo del Fraunces Tavern debido al procedimiento del Departamento de Justicia federal de aquel entonces (que buscaba evitar reduncancias), y las sentencias extensas que los integrantes de la FALN recibieron en el caso de Chicago.
De paso, ¿cuánto admira Luis Gutiérrez a Oscar López Rivera? A éste nivel:
Como todos los grandes próceres y héroes de la lucha por la patria y por su nación. En eso se va a ubicar. Mire...si esto fuera la guerra por la independencia de los Estados Unidos, las trece colonias, Oscar López Rivera, en los periódicos de Londres hubiesen dicho lo mismo que decían de Jorge Washington. Mire, la lucha por la independencia es una lucha que todo pueblo tiene derecho a sí mismo y una responsabilidad -como ha dicho Oscar- a llevar a cabo.
Más adelante, Gutiérrez asegura que "...un diá pronto, espero estar aquí en mi patria, luchando (por la independencia de Puerto Rico) con mi hermano y mi líder Oscar López Rivera." Si Gutiérrez tiene tanto afán de tomar la lucha, entonces sugiero que abandone su escaño en el Congreso, renuncie a su pensión Yanki imperialista, tome un machete, y se vaya con su lucha para Puerto Rico. De lo contrario, puede regresar a Chicago para seguir luchando por una amnistía migratoria, y dejar de hacerse pasar por portavoz de toda la comunidad puertorriqueña en la Isla y más allá.
No existe indicio alguno de que Al Punto vaya a presentar las perspectivas de quienes sufrieron a manos de la FALN, sea Joseph Connor o algún otro familiar de las víctimas de esos atentados horrendos. La cobertura que Univision ha brindado a Oscar López Rivera ha sido consistente en su sesgo, y esta entrevista - que parece haberse llevado a cabo a petición de Luis Gutiérrez - no cambia eso.
La entrevista fue grabada en antelación al término del plazo de arresto domiciliario de López Rivera. Está por verse si Al Punto cubrirá los saludos revolucionarios brindados por López Rivera a los regímenes asesinos en Venezuela y Cuba, así como su renuencia a renunciar a la lucha armada en pos de la independencia de Puerto Rico.
Más allá, la entrevista aparenta haber violado los términos de la libertad condicional de López Rivera; específicamente, la prohibición de hablarle a los medios mientras estuviese bajo arresto domiciliar. Univision incluyó ä pocas horas de su libertad" en el título del video en YouTube, pero López Rivera responde "mañana" cuando Ramos le pregunta que cuándo irá a la playa. Subsecuente a eso, López Rivera condujo su conferencia de prensa en la playa El Escambrón en San Juan el día de su libertad.
Univisión, cuyo canal 41 en Nueva York es auspiciador del Desfile Puertorriqueño en Nueva York y en donde se honrará a Oscar López Rivera, debería avergonzarse por su disposición a transmitir hagiografía terrorista y propaganda pro independencia de Puerto Rico.