Goya, la empresa de alimentos hispanos más antigua y mejor conocida de los Estados Unidos, ha retirado su patrocinio del Desfile Puertorriqueño de Nueva York, como resultado directo de la decisión del desfile de convertir el evento en un homenaje al terrorista impenitente de la FALN, Oscar López Rivera. Pero, ¿y qué tal con los demás auspiciadores?
El Diario de Nueva York, uno de los diarios de habla hispana más importantes de los Estados Unidos, informó que Goya retiró su auspicio al desfile mediante una carta a su junta de directores. Según la nota, Goya afirmó que “Esta decisión obedece a una campaña mediática y agresiva que está en las redes sociales contra nuestra compañía y sus excelentes productos, dando como razón que nosotros auspiciamos a un terrorista y miembro de la FALN, de nombre Oscar López”. Esto conflige con la declaración de la junta de directores del desfile, según reportó Latino Rebels, la cual indica que Goya no dio "raciocinio alguno" aparte de que fue "una decisión de negocios".
(ACTUALIZACION: El Diario ha retirado la nota de su página web. Pueden ver un enlace a la copia de Google Cache aquí. Tengo una captura de imagen por si hay desapariciones adicionales.)
Pero fue apenas la semana pasada que el Desfile tomó la decisión que terminó en la decisión de Goya. Según el Observer (de Nueva York):
El Desfile Nacional Puertorriqueño anunció hoy que dará al nacionalista puertorriqueño Oscar López Rivera- convicto en el 1981 en relación a una ola de bombardeos letales, incluyendo a uno que mató a cuatro en la Taverna Fraunces aledaña a Wall Street- su galardón inaugural de "Prócer de la Libertad Nacional", en la edición sexagésima del desfile a celebrarse en junio.
Lorraine Cortés-Vázquez, presidenta del desfile, anunció que el ex integrante de la organización marxista y leninista guerrillera Fuerzas Armadas de Liberación Nacional recibirá el galardón el el desfile anual, el cual se celebrará el 11 de junio a lo largo de la Quinta Avenida. En enero, el expresidente Barack Obama conmutó la sentencia de López rivera, sentenciado a 70 años por conspiración sediciosa, robo, transporte de explosivos y armas de fuego y por un intento de fuga de la prisión federal.
En resumen, tal parece que la "decisión de negocios" de Goya fue el de no tener nada que ver con una organización que haría desfilar a un terrorista impenitente por la Quinta Avenida luego de darle loas de Prócer de la Liberación Nacional".
Esta decisión es de gran importancia, dada la posición de Goya entre los auspiciadores como la empresa de mayor arraigo en la comunidad. Pero ¿qué dice esto de los demás auspiciadores? Si persisten en auspiciar el desfile aún después de la decisión de honrar a López Rivera, medios hispanos tales como Univision, Telemundo y SBS se vuelven cómplices implícitos de las tácticas, métodos, actos, y desenlaces deseados por López Rivera (cabe señalar que Univision, en particular, es el medio que más ha hecho para maquillar el verdadero historial de López Rivera).
Es particularmente inquietante que aún no hayamos escuchado nada de parte de JetBlue, Coca-Cola, AT&T, McDonald's, y (más doloroso aún porque soy fanático de toda la vida) los Yankees de Nueva York. Yo entiendo que una corporación decida auspiciar un evento con el fin de fomentar alguna buena voluntad dentro de la comunidad, pero la celebración de un terrorista marxista de clavo pasado es mucho más tóxico que cualquiera buena voluntad que pudiese surgir a corto plazo como resultado de tal auspicio. Faltando tan sólo unas semanas antes de que López Rivera haga su marcha triunfal por la Quinta Avenida, es crucial que estos coauspiciadores del desfile también tomen una postura y den una declaración para el récord.
Cualquiera que sea la opinión que ustedes tengan sobre Puerto Rico, los puertorriqueños, el estatus político de Puerto Rico, o las circunstancias que llevaron a la acumulación de $73 mil millones de dólares en deuda y la imposición de una Junta de Supervisión fiscal de parte del Congreso de los Estados Undos, sepan esto: La médula del movimiento que abogó para que el presidente Barack Obama conmutase la sentencia extensa de prisión de Oscar López Rivera NO refleja los deseos de la gran mayoría de los puertorriqueños en la Isla o en el exterior, ni tuvo el apoyo de base como que él fuese alguien digno de celebrarse.
Así caracterizamos esos esfuerzos al cubrir expresiones hechas por el congresista Luis Gutiérrez tras anunciarse la conmutación de López Rivera:
La conmutación de López Rivera no fue sino el apoteosis de una campaña masiva (y ejecutada de manera magnífica) de diseminación de noticias falsas (lo que ahora conocemos en inglés como "fake news"). Elementos de la izquierda radical, los medios, y la farándula se juntaron para presentar una imagen cuidadosamente elaborada de un abuelito tierno que cumple una cadena excesiva de prisión debido a su apoyo del ideal de independencia para Puerto Rico. Hubo escasa presentación, si acaso alguna, de la plenitud del récord de López Rivera; presentándose tan sólo una narrativa de "prisionero político".
La falta de honestidad de parte de los organizadores de este movimiento en pro de la liberación de Oscar Rivera López bien perturba a muchos tanto en Puerto Rico como acá en los Estados Unidos continentales. En base a lo que hemos visto, ni Luis Gutiérrez ni ningún otro de los organizadores de este esfuerzo se molestaron en denunciar con claridad lo que hizo López Rivera, o de plantear alguna justificación de lo que hizo. Por el contrario, muchos de ellos o tienen nexos con ese movimiento terrorista antidemocrático o lo justifican.
El esfuerzo por honrar a López rivera en el Desfile Puertorriqueño de Nueva York (encabezado por radicales de la izquierda tales como la alcaldesa de San Juan Carmen Yulín Cruz y la presidenta de la Asamblea Municipal de Nueva York Melissa Mark Viverito) no es sino un esfuerzo por fabricar la apariencia de un amplio apoyo para la causa de la independencia de Puerto Rico, de cara a un plebiscito de estatus a llevarse a cabo en Puerto Rico el mismo día del desfile, así como frente a los ojos del Congreso de los Estados Unidos. Una vez más, estos marxistas de Manhattan buscan imponerles cargas a sus hermanos puertorriqueños que ellos mismos se niegan a llevar.
Goya tuvo el buen sentido común de ver esta trama tal cual era, y quitarse del desfile. Espero sinceramente que los demás coauspiciadores sigan el ejemplo de Goya, y se nieguen a coauspiciar el terror.